Hotel con habitaciones de puzzles y torres

El Hotel Gladstone se encuentra en Toronto, en Canadá. El hotel fue renovado en el año 2005 y ahora luce unas habitaciones rediseñadas con un estilo único, además de salas comunes llenas de actividades.

El hotel tiene varios tipos de habitaciones, aunque será difícil encontrar dos habitaciones iguales. Todas las habitaciones son dobles con baño propio, pero varían en términos de tamaño, tecnologías y decoración. Las habitaciones tienen televisiones de pantalla plana, teléfono, una caja fuerte, conexión a Internet, almohadas hipoalergénicas y ropa de cama de calidad. Los techos son altos, los suelos son de madera y las ventanas son multifuncionales.

El hotel, de más de 30 habitaciones, se encuentra en un edificio histórico de la época victoriana, pero ahora se ha convertido en un hotel dedicado al arte. Cada habitación fue diseñada por un artista distinto, contando con la ayuda de artistas visuales, gráficos, diseñadores de interiores y arquitectos. Los diseños reflejan los diferentes puntos de vista que tienen distintas personas sobre la ciudad de Toronto.

Las 27 habitaciones Classic varían no solo en su diseño, si no también en su tamaño. Los cuartos de baño en casi todas las habitaciones son más pequeños y tienen ducha. El precio es de unos 129.6€ la noche. La habitación Offside tiene paredes de ladrillo y vigas de madera en el techo, con muebles y decoraciones blancas. La habitación Puzzle Room es más grande, y está decorada como si formase parte de un puzzle enorme, lleno de dibujos de los lugares más famosos y fácilmente reconocibles de Toronto.

Las seis habitaciones Gimme More son más grandes. Estas habitaciones tienen una bañera y una pequeña cocina. El precio suele rondar unos 153.1€ la noche. La Canadiana Room es una habitación que representa a Canadá, muy espaciosa, realizada en madera y decoraciones llenas de dibujos y fotografías de los bosques y los paisajes naturales de la región. La habitación Big Wood es un estudio moderno, lleno de colores, madera, con una cama queensize y una decoración jovial que representa la independencia de la juventud.

Las habitaciones Sweet Suites son dos espaciosas suites. Cada suite tiene un estilo propio, con un dormitorio con baño, un salón y una cocina. El precio por The Best Suite es de 294.55€ la noche, mientras que la Tower Suite cuesta alrededor de unos 373.10€ la noche. La Best Suite está pintada utilizando tonos suaves, con un diseño simple pero acogedor. Esta suite tiene una enorme bañera para dos personas y vistas hacia el sur y el oeste de la ciudad. La Tower Suite es aún más impresionante, con sus dos pisos y vistas hacia los cuatro puntos cardinales de la ciudad. En el primer piso se encuentra un baño, la cocina, el salón y un comedor con enormes ventanas arqueadas. El segundo piso, que recuerda una torre, tiene un dormitorio principal con vistas de 360 grados y un enorme baño.

El hotel tiene dos bares, el Gladstone Bar y el Melody Bar, que se pueden alquilar para celebraciones y eventos. Los bares abren seis días a la semana, y cada noche organizan actividades distintas. El Gladstone Café está dedicado a los platos más tradicionales, y los ingredientes son orgánicos, apoyan el comercio justo y son de  agricultura local. El Melody Bar es una bar donde los huéspedes podrán disfrutar de deliciosos cócteles, escuchar música en vivo, disfrutar de la música de los DJ’s o cantar karaoke.

En la recepción los huéspedes podrán utilizar el servicio de fotocopiadoras y fax o bien alquilar coches o limusinas. El hotel también ofrece servicios como salas de conferencias y reuniones. Algunas de las habitaciones se pueden alquilar a corto plazo y hay un servicio de catering.

Dos de las plantas del hotel albergan varias salas de reuniones y conferencias. En total, la capacidad máxima de todas las salas es de unas 500 personas. Las salas se pueden alquilar, y los visitantes podrán celebrar aquí sus reuniones de negocios o sus eventos y celebraciones más importantes. Regularmente en estas salas se organizan todo tipo de eventos y muchas de ellas se han convertido en galerías de arte.