El Hotel Beckham Creek Cave se encuentra en un territorio de más de dos kilómetros cuadrados. El hotel se encuentra en Arkansas, en Estados Unidos.
El Cave House, conocido como la Casa Cueva, se construyó teniendo en cuenta la importancia de la preservación de la naturaleza y el ecoturismo. La cueva tiene paredes y techos de piedra natural, y las ventanas son más amplias para crear un espacio grande y espacioso para los visitantes del hotel. A pesar de parecer una simple cueva desde fuera, una vez dentro uno se queda sorprendido por las tecnologías integradas en el hotel.
El hotel tiene un total de cinco habitaciones para los huéspedes, y una gran habitación común con cocina. La Great Room es una habitación muy grande donde se suelen celebrar eventos, e incluso tiene su propia pista de baile diseñada por profesionales. También hay una mesa muy larga para ocasiones formales para varios comensales. La habitación tiene una enorme ventana para permitir que entre la luz del sol, y una gran fuente de piedra que forma una cascada natural. Además, aquí los huéspedes podrán encontrar una televisión y un DVD, al igual que una gran colección de música que se podrá escuchar en un ambiente con una acústica ideal.
La cocina del hotel está equipada con toda clase de lujos y detalles, como varios hornos, grill, microondas, máquinas de hacer pan y un par de neveras. La cocina se encuentra al lado de la Great Room, y desde allí uno podrá acceder al área de la barbacoa o al patio.
El hotel también tiene una sala de entretenimiento en la segunda planta. Esta habitación es el sitio ideal para pasar una tarde en familia, con muebles de madera y un balcón. Desde el balcón uno podrá observar los alrededores de la cueva. En la habitación uno podrá encontrar una mesa de billar, una mesa para el ajedrez y juegos de mesa y cartas.
En el hotel uno podrá encontrar cinco habitaciones para los huéspedes, cada una con su propio cuarto de baño y su propia bañera o jacuzzi y bidet. Una de las habitaciones es la Suite de la Luna de Miel, una habitación más grande y más apartada de las demás, con su propia televisión y unas decoraciones de lujo. El precio por noche suele rondar los 306€ y uno podrá disfrutar de unos días apartados del ajetreo del mundo mientras se relaja en un lujoso hotel en un ambiente natural.
El hotel es un buen lugar para celebrar eventos de gran importancia como reuniones de trabajo, bodas o seminarios. La cueva tiene las mejores tecnologías para mantener la temperatura ideal en la cueva, y varios aparatos para absorber la humedad que están instalados en el hotel ayudan a respirar con más facilidad. En los alrededores del hotel, uno podrá ver las demás cuevas, dar largos paseos, ir de pesca, practicar el hiking o simplemente aprender más sobre la naturaleza.
El hotel Giraffe Manor en Langata, cerca de Nairobi, Kenia es uno de los hoteles más curiosos del continente. El elegante hotel de tres estrellas destaca por su inmenso territorio donde viven jirafas.
El pequeño y exclusivo hotel es famoso por sus habitantes algo peculiares, las jirafas. El hotel está rodeado por 47 hectáreas de bosque. Cerca del hotel podrán encontrar varias opciones de safari. Sin embargo, para ver a animales merodeando por el territorio de manera natural solo hace falta abrir la ventana del hotel, donde encontrará numerosas jirafas y varias especies de pájaros y otros animales, como el facóquero común. Muchas de las jirafas suelen meter su cabeza por las enormes ventanas del comedor, y uno podrá verlos y fotografiarlos en su hábitat natural.
El hotel, construido por el escocés David Duncan en 1932 está muy cerca de la capital del país, Nairobi, y desde allí se abren unas vistas impresionantes hacia el Kilimanjaro y las colinas Ngong. Más tarde, el hotel fue adquirido por Jock y Betty Leslie Melville, y en el año 1974 dos de las jirafas Rothschild se mudaron allí, creando el Giraffe Centre, un centro para jirafas en vía de extinción. El Giraffe Centre organiza excursiones para ecologistas, colegios y biólogos.
Este familiar hotel les ofrece a sus visitantes el mejor servicio y una de las mejores cocinas de Nairobi. Aquí podrá desayunar todas las delicias locales mientras unas atentas jirafas les observan desde el porche. La comida proviene de la agricultura orgánica y ecológica. El hotel organiza comidas, meriendas y cenas para grupos de un máximo de 150 personas. También se organizan eventos con cócteles y cenas, que se pueden reservar con anterioridad.
El hotel tiene seis habitaciones, todas ellas con su propio baño. Una de las habitaciones está decorada al estilo danés con las pertenencias de Karen Blixen, una autora, y una de las habitaciones es más grande y por tanto ideal para familias. El precio varía según el tipo de habitación. Una habitación doble suele costar unos 220€ por persona mientras que el suplemento para una habitación individual puede costar 89€. Todas las habitaciones incluyen en el precio las comidas, vino durante la comida, bebidas alcohólicas excluyendo el champán, servicio de lavandería, un vehículo para excursiones, y entradas para el Giraffe Centre. Gran parte de los ingresos va hacia el Fondo Africano para la Protección de Especies Protegidas, que fue fundado por uno de los antiguos dueños de la mansión.
El hotel también puede organizar servicios de recogida de los aeropuertos más cercanos. Los visitantes podrán contratar este servicio tanto para la llegada como para la salida al realizar la reserva, y por un coste extra de unos 30€ se les recogerá y se les dejará en el aeropuerto en las fechas indicadas.
Los visitantes de este hotel podrán visitar la capital del país, Nairobi, o bien disfrutar de la naturaleza desde el hotel. Se organizan varios safaris por el este africano. Aquellos que no quieran salir del hotel pueden pasear por los bosques en el territorio del hotel, visitar el Giraffe Centre o bien observar a las gentiles y elegantes jirafas.
El Hotel La Cartuja de Cazalla es un pequeño y original hotel en una antigua cartuja en Cazalla de la Sierra, en Sevilla, en España. La centenaria cartuja es un antiguo monasterio de la Orden de la Cartuja, alojado en el interior de la Sierra Norte de Sevilla.
El hotel se encuentra en un tranquilo y pintoresco lugar. El histórico monasterio está construido en una especie de plató natural, que está rodeado por paredes y un acantilado de 30 metros en el este. Los turistas que decidan alojarse aquí tendrán las mejores vistas de la Sierra Morena, y podrán observar las magníficas puestas del sol.
Cerca del hotel se encuentra una fuente natural de agua, y el pintoresco paisaje que la rodea. Este sitio ha sido reconocido históricamente importante, ya que al parecer siempre se utilizaba para propósitos religiosos. Se ha confirmado que este sitio ya estaba habitado antes que los Fenicios abriesen la «Ruta de la Plata». Todavía se conservan parte de las mezquitas y casas del siglo VIII, al igual que antiguos molinos.
Este sitio fue una mezquita, que después se convirtió en una casa de caza del Rey, y a principios del siglo XV se convirtió en el Monasterio de los Jerónimos. Más tarde, a finales del siglo XV, este monasterio se convirtió en en un Monasterio de la Orden de la Cartuja, y su capilla era conocida como «La Capilla del Peregrino».
En los años 1970, el edificio fue comprado y conservado como edificio histórico, y se convirtió en el Centro del Arte Contemporáneo y la Cultura. Años más tarde, por fin se reconvirtió en un pequeño pero acogedor y cómodo hotel.
El hotel dispone de un total de unas 4 suites en el monasterio, y de ocho habitaciones dobles y dos habitaciones individuales en la llamada Hospedería. Además, la pequeña Casa del Jardinero aloja a las familias y grupos, y tiene dos habitaciones, un salón, cocina y cuarto de baño. Cada una de las habitaciones tiene su propio cuarto de baño y todas las comodidades necesarias para una buena estancia.
El precio por noche varía dependiendo del tipo de habitación. Una habitación individual cuesta 50€ la noche y una doble cuesta 80€ la noche. La suite cuesta 120€ la noche, mientras que la Casa del Jardinero, que puede alojar hasta cinco personas cuesta los 300€ la noche. Hay que pagar unos 17€ por una cama extra. Sin embrago, los precios por habitación bajan después de la primera noche.
El hotel también tiene su propio restaurante, donde uno podría disfrutar de las mejores comidas y sabores locales. La gran mayoría de los productos son ecológicos, como el pollo, el cordero, huevos y hortalizas que crecen en los jardines del monasterio.
Además, este histórico lugar tiene bastantes entretenimientos y opciones de ocio. Uno podrá pasear por la naturaleza, observar las puestas del sol o relajarse en los jardines. En este hotel se organizan varias exhibiciones y hay una sala de conciertos. El hotel también dispone de una galería de arte donde podrán ver varias exhibiciones de varios artistas y pintores, y podrán participar en el taller artesanal. Además, los visitantes podrán participar en actividades como montar a caballo o bañarse en la piscina del hotel histórico.
El Hotel Parrot Nest Lodge se encuentra en la ciudad de Cayo, Belize, en Centroamérica. Este hotel es un curioso hotel en una casa de árbol, rodeado de la jungla y con cientos de loros volando cerca de allí.
El Hotel Parrot Nest Lodge es un pequeño hotel que es ideal tanto para relajarse en una jungla rodeado de la naturaleza como para observar los cielos nocturnos en busca de estrellas. Aquí uno podrá observar a los cientos de loros que habitan en el territorio del hotel y luego observar las estrellas de noche. Este hotel le ofrece a uno una verdadera experiencia tropical, donde uno podrá dormir en una casa de árbol en un guanacaste de más de 100 años de antigüedad. El territorio está muy cerca del río Mopan, donde uno podrá refrescarse en las tranquilas y claras aguas del río. Además, uno podrá pasearse por el territorio e incluso adentrarse en el bosque, y en ambos casos verá un gran número de loros y otras especies tropicales volando en el cielo. Si uno lo desea, también podrá observar a los grandes mamíferos, reptiles y anfibios, tales como el coatí o la gran iguana. Lo curiosos es que muchos de estos animales se suelen adentrar en los jardines y uno podrá ver el paisaje que le rodea sin tener que preocuparse de los mosquitos.
El hotel está justo en la pequeña ciudad de Bullet Tree Falls, muy cerca de la gran jungla tropical. El Hotel Parrot Nest Lodge está compuesto por dos casas de árbol y otras cuatro cabinas. El precio por habitación varía entre los 28 y los 42€ la noche, aunque un desayuno cuesta de 4.2 a 5.2€, mientras que la cena cuesta unos 8€. Con este precio extra podrán disfrutar de un desayuno y una cena normal o para vegetarianos en el porche de la casa principal.
Cada una de las casas de árbol y las cuatro cabañas se utilizan a modo de habitación doble, cada una con una cama doble y un ventilador. Además, dos de las cabañas tiene una cama extra, mientras tres de las cabañas tienen su propio porche. La mayoría de las cabañas también tienen su propio hamaca donde uno podrá relajarse. Además, hay agua limpia y potable en todas las cabañas.
Cerca de este magnífico hotel, a tan solo 4.8 kilómetros del pueblo de San Ignacio, uno podrá explorar los alrededores del esta fascinante región, nadar en el río, ver sus maravillosas cascadas y cuevas. Uno también podrá visitar los famosos sitios arqueológicos, unirse a un grupo para investigar la jungla, seguir los trazos de las plantas medicinales o visitar una granja de mariposas, entre otras muchas atracciones.
El Hotel Aurora Express es un hotel compuesto por varios vagones de antiguos trenes que antes circulaban por las antiguas vías férreas de la nevada Alaska, cerca del río Tanana. Los visitantes del hotel podrán quedarse en su habitación acogedora mientras observan los helados paisajes de la región.
En este curioso hotel cada habitación es un vagón de tren que fue comprado por una compañía y fue totalmente reformado, mientras que se instaló en un paisaje nuevo y se convirtió en un pequeño pero confortable y encantador hotel. Dentro de cada vagón hay solamente una habitación, junto con dos camas, sistema de calefacción, su propio baño y decoración artística. Desde las ventanas, podrán observar el tranquilo y blanco paisaje, y dar una vuelta por los bosques y las orillas del río.
Este hotel cuesta menos de 100€ la noche, un precio razonable que merece la pena pagar en este acogedor lugar. Los vagones están bien equipados, cada vagón con espacio suficiente como para alojar dos, tres o hasta cuatro personas.
La decoración interior está llena de objetos históricos de Alaska, cuadros y posters de la región y unas vistas realmente impresionantes. El bed and breakfast también le ayudará con excursiones por las distintas regiones y les servirá un desayuno deliciosamente local.
Hay varios tipos de vagón, el National Domain, con cuatro suites y del estio victoriano, el National Emblem, ideal para familias, el Golden Nellie, el vagón más grande y lujoso de todos, y el Arlene, que data desde la Segunda Guerra Mundial y tiene dos habitaciones. El Diner Car, el último vagón, es un lujoso bar que puede acomodar hasta 24 personas, ideal para comer o cenar.
Le Carré Rouge es un hotel donde uno podrá dormir en un pintoresco cubo rojo en mitad del campo. La obra es de Gloria Friedmann, una artista del arte contemporáneo.
El hotel está en la meseta de Lagnes, en Francia, y es un proyecto que apoya el eco turismo. El cubo tiene dos pisos y puede alojar hasta seis personas. Una parte del cubo está pintada de rojo, mientras el otro lado del cubo está cubierto de cristal.
En la planta de abajo podemos encontrar el salón comedor y la cocina, y en la planta de arriba hay tres camas dobles. El precio por un fin de semana es de 130€, y cada noche extra cuesta 30€. Los visitantes disponen de todo lo necesario para estar cómodos, incluyendo sábanas, edredones, mantas y almohadas, toallas y vajilla. También hay leña para la cocina y la calefacción. Dentro del cubo no hay ni agua corriente ni electricidad, por lo que uno podrá alejarse de la vida moderna mientras recupera el agua de lluvia con una bomba para poder lavarse y cocinar. Por las noches, podrán encender candiles y velas. Si desean, pueden visitar el pueblo cercano, que se encuentra a 700 metros de distancia del hotel.
Si uno quiere vivir una experiencia única lejos de la modernidad y la globalización, el hotel Kolarbyn es ideal para ello. El hotel se encuentra a unas dos horas de Estocolmo, cerca del lago Skärsjön, en Suecia.
El hotel Kolarbyn es sin duda el hotel más rústico de todo el país, ya que se compone de doce cabañas en un bosque a orillas del lago. Las cabañas no tienen ni luz ni electricidad, y cuando se hace de noche los visitantes encienden lámparas antiguas o velas. Dentro de las cabañas podrán encontrar dos literas con mantas de piel de oveja. En el caso de que haga frío, podrán encender la estufa de leña, aunque primero tendrán que recoger suficiente leña.
Los visitantes del hotel tienen varias barbacoas a su disposición repartidas por el campamento, y podrán preparar su comida allí. La despensa dispone de vajilla para los turistas, y si reservan con antelación se les aprovisionará comida suficiente del supermercado más cercano, a tres kilómetros del campamento. Para cocinar, uno podrá calentar su comida en la estufa de leña tradicional.
Los baños son rústicos, y si uno tiene leña suficiente podrán relajarse en la sauna más tradicional. También se pueden reservar excursiones por el bosque, todas ellas guiadas. Uno podrá observar a los alces en su entorno natural, ya que los guías han estudiado sus preferencias por los rastros de sus mordiscos, o ver los lobos de noche.
El hotel está abierto desde principios de mayo hasta finales de septiembre. El hotel les proporciona madera para fuego, agua fresca del pozo cercano, barbacoas, velas y cerillas, junto con mantas de piel de oveja. El precio por noche ronda los 27€ por adulto y los 13€ por niño. Por 5€ más podrán alquilar un saco de dormir. Al llegar, les ofrecerán una visita guiada por Kolarbyn, y tendrán acceso a las canoes si desean realizar un paseo por el lago.
El Hôtel Palafitte nos recuerda a los ya casi clásicos hoteles situados sobre pilotes en la Polinesia Francesa, salvo que se encuentra en el corazón de Suiza. El hotel se encuentra en el centro del lago Neuchâtel.
El hotel, situado sobre varios pilotes en el lago, tiene 24 suites, o apartamentos. Cada uno tiene una terraza privada y una escalera para que puedan bajar al lago y bañarse. Las vistas desde todas las habitaciones son más que espectaculares, ya que todas las ventanas dan al precioso lago.
Cada apartamento cuesta entre los 300€ y los 410€ en temporada baja. Sin embargo, hay algunas cabinas más cerca de la orilla que cuestan desde 285€ hasta los 300€. Para llegar al hotel, los visitantes deberán llegar a la ciudad de Neuchâtel, a 10 minutos del hotel, desde donde podrán tomar al autobús gratuito hasta el mismo.
Cada apartamento tiene su propia habitación y cuarto de baño, y es un lugar apartado e íntimo, ya que no se pueden ver las otras habitaciones desde las enormes ventanas de cada cuarto. Todas las habitaciones están amuebladas y disponen de las mejores tecnologías. Los visitantes que desean quedarse en este hotel dispondrán de una televisión de plasma, una minicadena y un ordenador.
Las vistas desde las ventanas del hotel son inigualables. Entre el lago y los Alpes detrás del mismo, uno podrá disfrutar de momentos de relax o darse un baño entre las tranquilas aguas del lago. Los visitantes también podrán visitar Neuchâtel, el centro de la industria relojera suiza, o dar paseos en barco por el lago.
El parador de Cañadas del Teide es en realidad una casa de alta montaña con unas panorámicas vistas, y es ideal para aquellos quienes quieren dejar atrás la ciudad y volar por un precio más que asequible hacia Santa Cruz de Tenerife. Lo más curioso es que este particular parador se encuentra en el Parque Nacional del Teide, un parque natural, y viene siendo el único edificio que se puede encontrar en todo el parque.
En este hotel el ambiente es muy acogedor, y uno puede disfrutar de las vistas de alta montaña tanto en las habitaciones individuales como en las familiares, al igual que en los salones comunes. Lo que más destaca de las vistas del hotel, son, sin duda algunas, las impresionantes vistas al Teide.
Este hotel le ofrece a uno la posibilidad de probar deliciosos platos de la cocina canaria más tradicional, y uno podrá degustar las especialidades de la región. El puchero canario o las papas arrugadas, dos de los platos más reconocidos, se pueden encontrar en el exquisito restaurante del hotel.
El Parador en si está situado en un cráter natural de las Cañadas del Teide. Este mágico parador se encuentra a más de 2000 metros sobre el nivel del mar. Desde el hotel, uno puede disfrutar no solo de las preciadas vistas al Teide, si no que también podrán contemplar la caldera de Chaorra o la Montaña Blanca.
Además, este hotel es el lugar ideal no solo para los amantes de la naturaleza, si no que también es perfecto para aquellos quienes se interesan por la astronomía. Uno podrá observar el cielo y las estrellas, que se ven claramente desde el parador, a más de 2125 metros sobre el nivel del mar, y disfrutar de una charla astronómica todos los viernes mientras contempla el cielo. El hotel dispone de dos telescopios que sus clientes podrán utilizar.
El hotel Rogner Bad Blumau es un estilo moderno que se lleva de maravilla con la naturaleza. El hotel se encuentra rodeado de unas colinas, y para no destacar entre todo lo verde que le rodea, el tejado está cubierto de hierba.
Este hotel fue construido por el renombrado arquitecto Hunderwasser, que inauguró el hotel a principios del 2000. Se encuentra en la ciudad que le da su nombre, Bad Blumau en Austria, y su diseño incluso ha sido comparado con el del mismo Gaudí.
En este hotel uno puede relajarse en un establecimiento termal que se encuentra en el centro del complejo. Además, el visitante podrá disfrutar de un restaurante que ofrece todo tipo de desayunos, comidas y cenas.
El hotel dispone de 312 habitaciones exquisitamente diseñadas. Algunas, concretamente ocho de las habitaciones, son más bien casitas de campo subterráneas. También hay trece apartamentos superiores que desde fuera se ven como párpados del edificio. Todas están pintadas de colores vivos, formas básicas y destaca la ausencia de las líneas rectas.
El precio por persona y noche varia entre los 120€ y los 260€ más los impuestos, y le permite a uno disfrutar del uso ilimitado de la instalación termal. El spa del hotel le ofrece al turista varios tipos de sauna distintos, masajes y diferentes programas de relax.
Por fuera, el hotel no deja de impresionarnos. Sus líneas onduladas, colores brillantes y diseños poco tradicionales inspiran a todos. En los jardines, se puede encontrar el roble milenario, y uno puede contemplar el paisaje natural sentado en su sombra.
Cerca del hotel se encuentra la deliciosa fábrica de chocolate Zotter y el curioso teatro de chocolate, ambos de ellos en Riegersburgabout, a unos 30 kilómetros del hotel. Uno podrá ver como se hace este producto y probar todos los chocolates y dulces que se producen allí.
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